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El temor
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Tengo frío corazón, miedo al dolor,
envuelve en tus brazos mi cuerpo sediento,
que tuve temor de aquella noche oscura.
Interminable fue sin ti,
con el viento murmurando llanto, gritando silencio...
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Dame unas lágrimas para lavar la ansiedad
que sintió el alma,
que la espera de ti fue larga.
Fue ruta solitaria y callada,
fue una cañada de tierra árida y áspero sol,
de abismos, y polvorientos caminos.
Un sendero donde el vacío se hace eterno,
donde la ausencia roda,
cuál daga hiriente, amenazando el vientre...
**
Fue esa duda torturando mil veces la razón,
que decía que jamás volverías a atravesar mi puerta.
Y ahora que estás de vuelta,
enciérrame en tus brazos, corazón...
embriaga mis sentidos, de ese amor que un día
enloqueció mi mente.
Borra del alma el dolor que causó muerte,
aleja los fantasmas del ayer, el temor de perderte.
**
Tan solo ven... ¡ abrázame !
Enciérrate conmigo en la alcoba de ternura y miel,
donde esperé sin flaquear, que sediento...
volvieses a probar, el néctar de mi manantial.
M.Ange Bonnevie
Cazilhac. 28 Avril 2001